• Cualquiera que esté siguiendo los mercados y leyendo las noticias recientemente probablemente esté familiarizado con el término short squeeze, un fenómeno que puede tener consecuencias brutales para cualquiera que esté en el lado equivocado del mercado.

El short squeeze explicado

El objetivo de las ventas en corto es generar ganancias a partir de una acción que pierde valor. Si bien existen beneficios potenciales de quedarse corto, también existen muchos riesgos. Un gran riesgo es cuando las noticias alcistas empujan al alza el precio de las acciones, lo que lleva a los vendedores en corto a salir todos a la vez. A medida que los vendedores en corto se apresuran a recomprar y cubrir sus pérdidas, el impulso alcista puede construirse sobre sí mismo, haciendo que las acciones se muevan bruscamente al alza. Esto se conoce como short squeeze.

¿Qué hace que un short squeeze sea tan peligroso? Piénselo de esta manera: cuando compra una acción, lo peor que puede hacer es bajar a cero. Pero la ventaja es ilimitada. Si una acción tiene una narrativa de crecimiento y hay suficientes “creyentes”, el precio de la acción puede ir mucho más allá de lo que parece razonable según las métricas fundamentales tradicionales.

Los signos clásicos de un short squeeze pueden incluir:

• Una narrativa dinámica que intenta justificar la separación de los precios de las acciones del valor intrínseco de una empresa.
• Un caso de crecimiento masivo y de estrés financiero.
• Operadores con bolsillos grandes alineados en ambos lados de la operación, a menudo utilizando opciones y otros instrumentos apalancados.

Con GameStop (GME) en 2021 y Tesla (TSLA) en 2020, hubo muchos signos clásicos de un short squeeze. Los operadores con posiciones cortas cubrieron sus posiciones porque tenían que hacerlo, ya sea porque habían sufrido grandes pérdidas o porque las acciones ya no estaban disponibles para tomarlas prestadas. Cuando una acción experimenta de repente una subida dramática, con o sin buenas noticias, es importante preguntarse: “¿Quién compraría acciones en este nivel?” ¿La respuesta? Alguien que no tiene suficiente dinero para aguantar más, o alguien cuyo umbral de dolor finalmente se ha cruzado.

Proceda con precaución

Si es un inversor a largo plazo que posee una acción que está siendo exprimida, probablemente no sea un buen momento para negociar. En lugar de actuar sobre la base de las emociones, recuerde lo que lo llevó a donde se encuentra en su viaje de inversión y donde le gustaría estar. Si participar en una acción que se encuentra en territorio exprimido no se encuentra dentro de sus objetivos a largo plazo, es posible que desee hacerse a un lado y no operar. Si decide aventurarse, asegúrese de no tener ilusiones ni conceptos erróneos sobre los peligros. Comprenda que cuando se trata de una acción que está siendo exprimida, está asumiendo un gran riesgo.

Identificar un short squeeze puede ser relativamente simple, después de darse. El truco consiste en identificar las condiciones que podrían provocar un short squeeze con anticipación y luego determinar cómo es posible que desee operarlo (o no).

Abrir en corto una acción es un negocio complicado. Debido a que no puede vender algo que no es de su propiedad, se requiere que el vendedor “pida prestado” las acciones (y pague intereses al prestamista de las acciones) y después las venda. En ocasiones, la localización de las acciones puede resultar difícil para su empresa de compensación debido a la alta demanda o una pequeña cantidad de acciones en circulación.

Para medir un short squeeze puede ayudarle una métrica llamada “short interes ratio”. Indica, en días, cuánto tiempo llevaría cubrir o recomprar todas las acciones en corto. Básicamente, divide la cantidad de acciones vendidas en corto por el volumen de negociación diario promedio. Cuantos más días, más pronunciado puede ser el efecto.

Considere los fundamentos

Si está comprando una acción que parece estar sufriendo un short squeeze, especialmente en niveles altos, es útil comprender otras posibles razones por las que la acción podría estar moviéndose.

Considere verificar los fundamentos. ¿Hay algo que le haga querer poseer las acciones? ¿Estás tentado a comprarlo porque todos los demás lo están? Es importante hacer siempre los deberes y recordar que nunca es prudente ir con todo. Una acción que está en un short squeeze puede tener un largo camino por recorrer, y si no cree que los fundamentos respalden precios más altos, entonces tal vez usted debería buscar en otra parte.

En el caso de TSLA en 2020, hubo algunos fundamentos positivos detrás del short squeeze, incluida la rentabilidad más consistente de la compañía y las esperanzas de que se incluyera en el índice S&P 500 (SPX). La acción vio cómo el precio de sus acciones subió a nuevos máximos y luego disminuyó casi un 60%.

Pero luego TSLA se recuperó y dividió sus acciones, y su incorporación al SPX se convirtió en una realidad, lo que ilustra que un short squeeze no siempre tiene que terminar mal. Otras acciones que sufrieron short squeeze no siempre les ha ido tan bien, en parte porque no tenían el apoyo de los fundamentos.

¿Operando el short squeeze?

Si desea operar una acción durante lo que podría ser un short squeeze, aquí hay algunas cosas a tener en cuenta:

• Operar con una acción de este tipo puede estar bien siempre que comprenda el riesgo y cómo controlarlo. Ya sea que realice operaciones pequeñas o grandes, debe controlar y limitar el riesgo. Decida con anticipación cuánto dinero se sentiría cómodo perdiendo en cualquier operación.
• No subestime qué tan alto puede llegar la acción y cuánto tiempo puede tardar. Cuando una acción queda atrapada en un short squeeze, los analistas generalmente esperan que se corrija eventualmente, pero nadie sabe a qué precio y cuándo; si es que finalmente sucede.

Conclusiones

Un short squeeze es una situación de alto riesgo y puede causar estragos en el mercado, pero la mayoría no dura para siempre. La mayoría finalmente desaparece.